En la base de una montaña en el sur de Serbia, Aleksandar Tanic arranca un puñado de los pimientos más picantes del mundo; son rojos, amarillos y naranjas de hileras de frondosas vides dentro de un invernadero cuyo techo está cubierto con una capa de nieve.
AFP-Siberia | Entre ellos se encuentra el regordete y retorcido Carolina Reaper, considerado el pimiento más picante del mercado, según Guinness World Records.
Desarrollado por primera vez en Carolina del Sur, cuenta con un promedio de 1.6 millones de unidades de calor en la «escala Scoville» que mide la capsaicina, el ingrediente que le da a los pimientos su poder de fuego.
A pesar de las temperaturas invernales de Serbia, Tanic dice que no tiene problemas para cultivar los pimientos en el suelo debajo del monte Koritnyak en la ciudad de Niska Banja.
anic comenzó a investigar los pimientos hace unos años «por amor a la cocina y la comida picante», contó.
Comenzó a probar variedades de los Estados Unidos, el Caribe, América del Sur y Asia que eran mucho más picantes que los pimientos rojos que se consumen en Serbia.
«Solía pensar que estaba comiendo comida picante antes, pero después de probar este tipo de chiles me di cuenta de que nunca había probado el verdadero calor», expresó.
Con la ayuda de su padre Svetislav y un amigo, Tanic ahora cultiva unas 15 variedades, incluidas:
- La Trinidad Moruga Scorpio, que tiene 1.2 millones de unidades de calor.
- El Seven Pot Habanero y el Mustard Habanero.
LA COMIDA PICANTE PODRÍA REDUCIR EL RIESGO DE MORTALIDAD
Muelen los pimientos más picantes para obtener salsas ultra picosas con sabores que van desde la pera hasta el chocolate.
En la pequeña cabaña donde seca los pimientos en una rejilla, la intensidad de las partículas de pimiento en el aire dificultan la respiración.
Con las abejas y el viento entrecruzando diferentes cepas para hacer nuevas variedades de pimiento, es difícil medir el calor de todos sus productos.
Cuando las temperaturas vuelvan a subir el próximo verano, planea exhibir los productos calientes con una competencia para comer chiles que no será para los débiles de corazón o lengua.